La inflación de octubre se acelera y ya se proyecta por encima del dato de septiembre en Argentina

La inflación de octubre en Argentina se proyecta ya por encima del índice de precios al consumidor (IPC) de septiembre, según varios informes de consultoras privadas. El adelanto anticipa un mes de mayor presión sobre los precios, en especial en alimentos, servicios regulados y en el contexto de volatilidad cambiaria.
Principales causas del repunte
-
Volatilidad del tipo de cambio y expectativas anticipadas: La suba del dólar y la incertidumbre política previa a las elecciones estimularon coberturas financieras que impulsaron aumentos de precios, en especial en rubros importados o con insumos dolarizados.
-
Aumento de precios de alimentos estacionales: El capítulo alimentos se proyecta ubicarse en torno al 2,2 % para octubre, superior al 1,7 % registrado en septiembre. Dentro de éste, destacan aumentos de carnes (~4 %), frutas (~7 %), cereales (~3,5 %) y bebidas alcohólicas (~4,5 %).
-
Subas reguladas y de servicios públicos: Se registraron incrementos en transporte público del AMBA (~3,9 %), telefonía e internet (~3 %) y prepagas (~2 %) que suman a la presión general de precios.
-
Incertidumbre política: La cercanía de elecciones y los cambios de expectativas sobre política económica aportaron al clima de precios más elevadas, ya que agentes económicos y consumidores anticiparon reajustes de precios.
¿Qué magnitud puede alcanzar?
Mientras que la inflación de septiembre se ubicó en torno al 2,1 % mensual, diversas consultoras estiman que octubre podría cerrar entre 2,2 % y 2,5 % o incluso más, dependiendo de los efectos de fin de mes. Esto implicaría un ligero pero significativo repunte que llama la atención dada la búsqueda de estabilización de precios.
¿Qué implica para el contexto económico?
-
Un mes de inflación más alta de lo previsto puede tensionar las expectativas de inflación a futuro. Si los agentes comienzan a anticipar una inflación mayor, podrían ajustarse salarios y precios, generando un efecto de “inercia”.
-
Para el gobierno y el banco central, el reto persiste: contener la inflación sin descuidar crecimiento económico ni generar tensiones adicionales sobre el tipo de cambio.
-
Los hogares más vulnerables se ven especialmente afectados por los aumentos en alimentos y servicios, lo que pone en evidencia los riesgos sociales de un repunte inflacionario.
Aunque la aceleración de la inflación en octubre aún no representa un salto extremo, sí constituye una señal de alerta. Las causas combinadas —alimentación, servicios regulados, dólar, expectativas— marcan que la batalla contra la inflación no está ganada. Será clave que en los próximos meses no se desencadene un proceso inflacionario más acelerado o persistente.





