Hugo Moyano y Mariano Taglioti: un vínculo de complicidad ante múltiples denuncias por acoso y maltrato
Recientes denuncias han destapado un preocupante entramado de complicidad que vincula a dos polémicas figuras: Mariano Taglioti y Hugo Moyano. A medida que más voces se alzan, se revela un patrón de conducta que ha permanecido oculto durante varios años.
Mariano Taglioti enfrenta innumerables denuncias de acoso, que fueron destacadas por el colectivo de mujeres “Araucarias“. Una de las denunciantes, Constanza Ryan, compartió su experiencia: “Me hablaba después de hora, me mandó solicitud de Facebook, no se la acepté y me mandó un audio preguntando por qué. Luego empezó a hablarme de sexualidad y de qué les pasaba a las mujeres porque él conocía chicas que les gustaba que les peguen en la cama, así que no entendía por qué si las feministas denunciamos la violencia hacíamos eso. Me levantó muchas banderas rojas, le dije que era un desubicado y no me dirigió más la palabra”.
Otro testimonio anónimo relata situaciones inquietantes: “El tipo la presionaba para abrazarla, la seguía hasta el baño… (Araucarias prefiere no mencionar el resto del relato para no exponer a la trabajadora). Ella siempre decía que tenía esposo para intentar ponerle un límite”.
La conocida periodista Javiera Nasser también se sumó a las denuncias, relatando: “Yo les decía a mis compañeras que lo denuncien porque lo que hacía era acoso sexual. Un día el tipo se volvió loco, insultaba a todos. El problema fue que en el pasillo empezó a gritarle a una compañera y yo la defendí. Él le gritaba: ‘¿Vas a llorar? ¿Así solucionan las cosas las mujeres?’ Le dije que era un maltratador y un acosador y ahí cambió y me pidió perdón, pero después pidió que me echen. Sentí que me cuestionaron a mí por haberlo acusado. Yo estaba embarazada, pero preferí renunciar para no cruzármelo“.
El escándalo se agrava al conocerse que Taglioti fue echado de Vialidad Provincial tras una denuncia por acoso sexual y maltrato doméstico. Según testimonios de empleadas, la policía tuvo que intervenir para sacarlo del edificio.
La relación con Moyano no es casual. Hugo Moyano también ha sido acusado de maltrato, en un caso donde una ex empleada de su radio, Isabel, relató haber sufrido maltrato verbal y psicológico. Ella había faltado un día debido a las extremas condiciones climáticas y fue amenazada por Moyano, quien le dijo: “Si tenías que ir caminando y tenías que ir de rodillas a tu trabajo, debías hacerlo. Te echaré del trabajo como sea sin derecho a nada”. Isabel le rogó que dejara de maltratarla, afirmando que “ella era un ser humano como él o cualquier otra persona”.
A medida que las mujeres pierden el miedo y comienzan a hablar, se revela un oscuro entramado de complicidad. Moyano y Taglioti, aliados de Pablo González y Pablo Grasso, han utilizado su influencia para amedrentar a sus víctimas, confiando en que sus contactos les otorguen impunidad ante la justicia.
El silencio que ha rodeado a estas denuncias parece estar quebrándose, y la sociedad observa con atención las posibles repercusiones para ambos. La valentía de estas mujeres marca un precedente en la lucha contra el acoso y el maltrato.
